Terminando el año con una experiencia inolvidable

Acabamos el año con una de las jornadas más épicas que hemos vivido en MTB Pyrenees.

Las peores condiciones pueden ser las mejores, sólo depende de la actitud.

Desde las nevadas cumbres hasta los profundos bosques.

Mantos de hojas, colores, nieve, barro, roca, raíces, lluvia, niebla y una compañía inmejorable en el otoño más salvaje.

El Valle de Tena ha vuelto a poner el listón muy alto.

Nuestro día daba comienzo en el corazón del Valle de Tena, todavía no estábamos convencidos de que todo fuera a salir bien.

Un claro entre las nubes, y los grandes muros de la sierra de La Partacua aparecieron frente a nosotros. Una imagen que quedara grabada en nuestras retinas para siempre.

La emoción del equipo esta al 100%. Buscamos un mayor desafío y con nuestros remontes 4×4 nos dirigimos a las cotas más altas en busca de las primeras nieves del año. Sensación única el poder rodar por aquel silencio inmenso, que sólo era roto por el crujir de la nieve a nuestro paso.

Sin lugar a dudas el descenso más épico que hemos tenido. Las condiciones eran de lo más extremas, pero gracias a la gran actitud del equipo, todo fue inmejorable.

Desde las cotas más altas y nevadas, hasta los mágicos bosques de Tripilituara.

Una gran experiencia difícil de repetir.

¡Gracias chicos!